LA BESTIA DEBE MORIR
( The Beast must Die )
FICHA TÉCNICA:
Director: Paul Annett.
Año: 1974
Duración: 93 Min.
Intérpretes: Calvin Lockhart, Peter Cushing, Charles Gray,
Anton Diffring, Marlene Clark, Ciaran Madden, Tom Chadbon,
Michael Gambon, Sam Mansaray, Andrew Lodge, Carl Bohun.
SINOPSIS: Un millonario exigente, obsesionado con ser el cazador
en la vida y no la presa, reúne a cinco personas (supuestamente
sospechosas de asesinato en sus pasados respectivos) como huéspedes
un fin de semana en su mansión (protegida con una novedosa y
grandiosa alta seguridad), con la intención de desenmascarar
a uno de ellos, que es el hombre lobo.
Interesante película británica, producida por la Amicus, quizá algo
anticuada, pero en cierto modo, peculiar. El hecho de combinar
películas clásicas como El hombre lobo, los diez negritos, o El juego
más peligroso, es seguramente su mejor factor. Muy al estilo también
al cine de la Hammer, o cine de Agatha Christie, aquí el espectador
es simplemente un detective más, viendo los hechos pasar uno tras
otro, hasta el desenlace final, donde se descubre al asesino (en este
caso, hombre lobo)...
La historia comienza bastante bien, pero va flojeando, hasta su final
(donde el espectador quizá cansado ya, espera ansioso descubrir al
"hombre lobo"). La dirección, guión, música son de lo más normal,
tirando a bien. Los efectos especiales están cuidados, pero dejan
mucho que desear (el hombre lobo no es más que un perro grande
rellenado quizá de pelo, y en toda la película no se llega a ver
ninguna transformación del hombre lobo...). No posee gore (lo más
violento es la primera muerte de la película, donde el hombre lobo
ataca y desfigura a un hombre). La fotografía, es demasiado oscura
e indecente (Parece que estemos en un spaguetti-western setentero
cutre). Las interpretaciones son el punto fuerte de la película.
El protagonista de toda la historia no es el hombre lobo, ni mucho
menos, es sencillamente, el cazador, es decir, el actor negro Calvin
Lockhart (muy influenciado por la moda blaxpotation, y como no,
Shaft). Su personaje, carismático, creído, salvaje, enojado y real,
es lo mejor de toda la película. Los secundarios tales como el gran
Peter Cushing, Michael Gambon o Tom Chadbon, pasan sin más
importancia por toda la película para el espectador como simples
sospechosos... siendo eso si, a cada cual, más curioso.
El punto final, a los 10 minutos de acabar la película, como ya nos
comentaba el narrador al inicio, dan 30 segundos al espectador para
que averigüe quien es el hombre lobo... algo como usual y para mi
gusto, divertido. De todos modos, vista actualmente, la película
es bastante predecible.